CAPÍTULO I
EL ORIGEN: ELLA Y EL REINO
ella era una mujer y lo había sido desde varios años, su papel en el pequeño ducado era mínimo como cualquier fémina de su época, criada para servir a su dueño, pero era diferente, provenía de una poderosa y acaudalada familia que gobernaba dichas tierras concedidas tal vez por su tirano tío a quien no le importaba mucho su pueblo, se morían de hambre y él gozaba los beneficios de su cargo nadie le contradecía, al hacerlo muchos morirían, ella reacciono a buena hora y reconoció que su lugar no era el de una sirvienta con dinero sino el de estar con un pueblo desdichado y pobre, quería cambiar eso pero su labor se veía impedida por su familia que la consideraban una desgracia, su padre no dudo en casarla, creía que cambiara tras el matrimonio, no heredaría nada, ni el ducado, ni el dinero, como siempre lo decía. Tras estallar una de las devastadoras y profunda guerra murió su hermano quien tendría las enormes tierras, tras el dolor de la perdida muere el duque y nombra al esposo de su hija como único heredero, así comienza un gran rencor hacia los hombres pero para llegar a ser necesitaría de ellos y lo logro, acuso a su esposo de traidor y su tío lo condenó, tras el camino libre enamora a su tío y la nombra Gran Duquesa de las tierras a las cuales no tenia derecho ese paso la convertía en la mujer más poderosa del Reino, su nombre no tenia limites y era muy respeta por la Corte, además de ser querida por el pueblo.
No dudo en ser grande a su pequeño ducado, era el más pobre de todos, los nobles gozaban ir allí, les encantaba robar, pero ella detestaba eso y así fuera les prohibiría la entrada pero su poder no alcanzaba para eso, hizo reformas, acepto el sexo y las relaciones prematrimoniales como base de la sociedad, legalizo los matrimonios familiares y permitió a las personas decidir sobre su sexualidad y no impido el amor entre ellos, muchos dudaron y la Corte temía su expansión, le impidieron financiar sus reformas para sofocar a la incrédula duquesa, ella no accedió, el poder de los aristócratas terratenientes había sido limitado fueron despagados de sus tierras y entregadas al pueblo como gesto de voluntad y trabajo, era una Estado justo y no querían a un nuevo duque el pueblo se creía independiente ante la Corte y el Rey no se pronunciaba a lo dicho, la felicito y se alegró por el ducado más poderoso del Reino.
La iglesia la creía una amenaza había impedido por muchos años a que entraran al Gran Ducado no cambiara su posición, la duquesa detestaba a los creyentes, la fe no los salvara, la fe no los hará mas rico, porque la fe los hará mas idiotas, el Papa protestaba ante el Rey pero él se negaba a contestar, la excomulgaron y la declararon hereje para que su pueblo la detestara pero fue al contrario creían en su palabra y decisiones, también detestaban a las iglesias que eran poseedores de fe, que se vendían en cualquier momento. La Corte seguidora del adoctrinamiento obligaron a la hereje abrir un templo en Giron lugar donde vivía la Duquesa, pero ella se negaba, no permitiría engaños en su Estado, el Rey no soporto tal presión y le ordenó aceptar la iglesia, temió a ser un lugar de marginados, rechazaban las antiguas reformas pero debían vivir con ello y declararon a Giron como un lugar de perdición enfurecida arremetió contra los templos, ordeno la ejecución de los sacerdotes y voluntarios no se hablaría del tema era una guerra contra la iglesia donde ella no podría ser la vencedora. Su tío la quería más y expulso a la iglesia por no aceptarla como él lo hacia.
